Espero que hayáis pasado un muy feliz puente, porque hoy vuelvo con las pilas cargadas, aunque sea por poco tiempo. Si esta semana el blog ha estado OFF, la que viene ni os quiero contar, que será bastante completita. Pero en fin, esa es otra historia, y ya la contaré en otra ocasión. Hoy os traigo un ¡Tenía que decirlo! referente a nuestras adoradas y a la vez odiadas portadas.
~En el mundo de la edición, nos hemos llegado a encontrar maravillas de la creación, portadas que entran por los ojos, y a partes iguales, otras portadas tan rematadamente malas que han hecho los gustos de los críticos más duros. Sin embargo, sea como sea, las portadas con sobrecubierta, la mayoría de las veces nos encontramos, al retirarlas ilusionados, que debajo del papelito que forra el libro hay una tapa negra. Y yo digo, ¿tanto habría costado grabar/dibujar/plasmar/editar la tapa de debajo de la sobrecubierta?
No es que me disguste la tapa negra, pero en mi caso, al leer me resulta más cómodo quitar una sobrecubierta, y encontrarme debajo lo que se dice nada, hace que me desanime un poco.
¿Y vosotr@s qué opináis? ¿Es cosa mía, o vais a decirme que no soy la única? ;)
2 relámpagos:
¡Vaya! Si que es bonita la portada que has enlazado *0* Pues la verdad es que algunas editoriales se curran mucho las ediciones, pero hay otras que... puff. Parecen que hayan hecho las portadas con los pies xDD Y eso de las sobrecubiertas... pienso lo mismo que tú, que al quitarselas, queda todo negro y no te dice nada el libro así :(
Besos.
Pues a mi lo que no me gusta (aunque queda mucho mejor) es que al quitar la sobrecubierta quede la misma portada debajo ¿para que le pones sobrecubierta entonces?
Un besoo
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